Éramos capaces de escribirnos el amor bajo la perspectiva de lo eterno. Tal vez éramos infantes, tal vez te quise. Tan solo sé que nos creíamos eternos. Y ahora no sabemos ni quienes somos.

me he perdido...

Búscame en tus pies, en tus piernas, en tu rodilla, en tu cadera, en tu sexo, en tu barriga, en tu ombligo, en tu espalda, en tus manos, en tus brazos, en tu cuello, en tu oreja, en tu cabello, en tus ojos, en tu nariz, en tu boca, déjame perderme en tu cuerpo, déjame besarte y allí me encontrarás... sin ninguna dirección en la mitad de tu cuello.

Político al volante

Era un hombre completamente corriente pero en cambio, lo que resaltaba de él no era su interminable sonrisa ni su buen humor y ni si quiera su entusiasmo, él lucía una gran melena rubia, inadecuada para su elevada edad, algo extraordinario y bastante raro para los años que tenia. Pero en cambio él aparentaba menos edad de la que te podrías imaginar, una verdadera ventaja, y su mujer así lo sabía. No os confundáis, no estoy diciendo que ella este con él por el simple hecho de tener pelo, no. Pero…  donde hay pelo hay alegría y él de eso tenía bastante. Pero en cambio no toda la alegría del mundo es equivalente a toda la suerte del mundo, y es aquí donde os quería llevar, el pasado miércoles murió atropellado cuando iba del brazo de su mujer cruzando un paso de cebra.

Fue terrible creerme, pero no he visto algo tan bonito en mi vida. Es cierto que habría sido mejor si él no hubiera muerto y todos hubieran comido perdices encima de una mesa grandiosa de madera rodeados de sus seres queridos. Si, habría sido la próxima película de Disney, pero eso no existe, es ficción y la realidad es como os la contaré a continuación; él se disponía a cruzar la calle cogido de la mano de su mujer. Sospechar, si aún no hemos viajado al futuro es para ahorrarnos las tristezas, los dos eran en ese momento las personas más felices del universo, pero todo eso sin saber el futuro, sin saber que dentro de unos segundos un loco perturbado con esmoquin, corbata y zapatos, seguramente; político al volante, iba a intentar involuntariamente atropellarlos a los dos, en cambio él apartó de un empujón a su mujer y la pudo salvar. Des de el final de la calle -que es donde estaba yo- se escuchaban los llantos de la mujer, milésimas de segundo después de atropellar aquel perturbado a su marido. Llantos y llantos y más llantos, y lo peor de todo es que aún no sabía que estaba muerto, imaginaos si le hubiesen disparado, no me imagino el amor que debía haber entre esa pareja. En medio de la calzada estaba hecho un guiñapo el hombre que había compartido con ella muchos años de existencia, y ahora bajaba del coche el culpable de su muerte. Yo personalmente le habría matado al segundo, después de sacar el pie del coche y antes de ponerlo en el suelo ya le habría matado las veces que me hicieran falta para olvidarme de mi mujer, pero ella ni se inmuto.

El culpable, en ese momento el hombre más odiado del mundo, bajo de su coche. Era calvo con gafas y con una barba demasiado descuidada para su edad, quizás fuera un político. Pero en general era feo, muy feo, demasiado feo para ser real, no es que le odie, aunque debería y podría, pero una persona capaz de atropellar a alguien es feo y nada más, no se merece buenos adjetivos. Pero era un feo con dinero. Exactamente con un Mercedes, quizás dos o tres o cuatro, pero ojalá los tenga abollados.

Aunque no lo creáis, bajo de su Mercedes con la mayor calma del mundo, lento, mesurando cada una de sus pisadas. Como si él no hubiera hecho nada, o creyendo que si lo ha hecho se convertiría en un juicio completamente ganado. Ni si quiera se acerco a la mujer ni al hombre, supongo que por miedo de mancillar sus zapatos.

Pronto llegó la policía, y enseguida apareció el furgón del atestado, mientras todas las bocinas del atasco sonaban y los peatones formaban un corro ante el espectáculo gratuito. Con la sábana cedida por una vecina, alguien cubrió el cadáver, que aún asomaba los pies desnudos por debajo. Durante un tiempo, la mujer estaba allí paralizada sobre el bulto ensangrentado que fue su compañero, mirando con los ojos perdidos al joven que lo había matado, y cualquiera pudo imaginar sus sentimientos. O por lo menos yo sí, enseguida corrí como una vieja maruja al lugar del accidente, y tuve suerte, pude ver los ojos de la mujer, creerme en sus ojos estaban escritos sus sentimientos. No me equivoque al decir que entre esa pareja había un amor verdadero, aquel que cuesta encontrar pero sin embargo ella lo había encontrado y amado, pero en unos segundos él le había entregado su vida simplemente para que no muriera, esto es el amor verdadero decía. En cambio ella no sentía rabia, simplemente tristeza por haber perdido al único hombre al que pudo amar pero ella guardó silencio hasta después del funeral. Cuando su marido descansaba bajo tierra confesó su emoción a una amiga mientras ambas compartían bollos con chocolate en un bar. Desde el día del accidente no había podido dormir, era tanta la añoranza que ella sentía que era imposible no soñar con él. Rezaba y rezaba para que simplemente hubiera sido un sueño lo que ella había vivido. Y lloraba por no haber vivido más aventuras con él.

No es la historia más bonita del mundo pero es una historia donde, por mi punto de vista, el amor triunfa, eso sí, no de la mejor manera.

Declaraciones de un asesino

“Tan solo recuerdo la dulce boca de aquellos pequeños infantes, enamorados quizás. Ahora esos sentimientos lastimados. Agarrotados. Pero escucharme, no por ello significa que no los necesite. Son enormes trofeos para mí. Como el noble cazador que enmarca en su habitación, lo que sin saberlo, podría haber sido en otra vida. El tacto, el olor son premios para mí, e incluso el honor de haberlos destruido. Aquí y ahora, a punto de unirme a ellos, no gritaré ni alzaré la voz lo más mínimo, lo siento pero lo único que hice fue demostrar sus existencias, como ahora, quizás, haréis conmigo. ¿Acaso, astuta dama, aquella que me mira con aspecto desafiante, después de que yo me muera será quien se queme lentamente y finalmente me acompañe?” Estas fueron sus últimas palabras. Fran Bell anuncio su esperado final y de mientras mancillaba con su propia sangre su rostro carbonizado, una sangre probablemente sucia, oscura y espesa.

Antes de tu amor

Antes de tu amor, caminaba entristecido, derrotado tras una batalla perdida. A pequeños pasos de un lado a otro, con la espalda curvada y las manos derrotadas por debajo de las rodillas. Unas rodillas envejecidas por el desamor, igual que mis pensamientos. Un cabello, incluso también derrotado y envejecido, un cuerpo abandonado y mudo. Nada que ahora poseo era mío. Mi corazón ni si quiera lo encontraba ahora es simplemente tuyo, mi sangre sucia corría decaída. Con deseo de desaparecer vociferaban mis sentimientos. Mis ojos no habían apreciado tu sonrisa ni mis oídos tu voz ni mi olfato tu perfume ni mi tacto tu piel. Ni mi corazón el tuyo.

Mensaje para toda la humanidad

astuto cielo

A escasos centímetros unos revolucionados ojos verdes acompañados por una inagotable dorada melena. Si no hubiera sido por mi incansable valentía mis pasos ni si quiera se habría movido, pero no fue así, ocurrió como si dentro de mi se llevara a cabo la más irresistible maquina de vapor, conduciéndome de izquierda a derecha. Palpitando mi corazón, como un hipócrita, enjaulado y enamorado. En ese momento se hizo más larga su melena y más verdes sus ojos. Más larga su sonrisa y más débil mi corazón. Arrasando como una agresiva carnívora todo lo que se encontrarse a su paso, haciéndolo más débil para ella. Lo recuerdo, la lluvia transparente corría a una excelente velocidad por el aire, lamentablemente se estrellaba cada gota, lo antes posible contra su malvada tierra, como una estupida competición. Nos envolvía un valeroso hedor a invierno, continuamente frío y áspero pero incluso calido y romántico en momentos oportunos, suavizaba todo lo que me rodeaba. La mire con locura, como si con esa mirada sus ojos pudieran ser míos. Aún no había hablado con ella y ya echaba de menos su melodía. Su voz la sentía mía, la añoraba como parte de mi cuerpo. Es cierto soy egoísta, ni la conocía y ya quería hacer de su perfume algo eterno. De su sonrisa algo mágico y de su cabello algo más poderoso que el Sol, no viviría sin su cabello. Largo, intenso, denso, inacabable para mis besos. Una voz silenciosa irreconocible enmudecía mis oídos. Sus ojos, su sonrisa los haría eternos. Créeme si os digo, que no estoy loco por algo inusual, sino por un simple amor, el amor del Sol hacia la Luna o del cielo a las estrellas. ¡Es cierto lo que dicen! Tus ojos también brillan como el Sol de día, como la Luna valiente de noche. Como el cielo intenso, con millones de ojos denominados estrellas. ¡Bah! Que no nos engañen los infantes pueblerinos; el cielo, el firmamento, el edén de encima de nuestros cerebros, aquel que posee el famoso paraíso, no son estrellas, ¡no Señor!, ¡yo a ti mi Amada te lo digo, para que no caigas en sus redes de hipocresía astuta! Son simplemente ojos relucientes de otras muchas mujeres que se acercan débilmente a ti y poseen también hermosos ojos brillantes. Aquello que observamos es solamente el reflejo que de la tierra reluce hasta el cielo. No dormiré, ni cerraré mis pobres ojos ni descansaré mi cuerpo, hasta encontrar el hermoso y gran reflejo de tus bellos ojos en este astuto cielo.

pero nadie tiene la sonrisa que ella muestra

El amor es rubio, y femenino. Tiene ojos marones y es adolescente, dos años mayor que yo, creo o incluso tres, ahora mismo no me acuerdo. De dientes blancos, y labios rojos, pero no tan rojos como el color de la sangre o el color de tu corazón o del mío, sino un rojo semejante al rosa, un rojo claro, un rojo bonito, más enamoradizo que cualquier otro rojo. E incluso te aseguro, que como es amor acaba enamorando a cualquiera, e incluso a mí, dirían sus labios. El amor, tiene el cuerpo liso, firme, que yo recuerde con pocas pecas. Lunares escasos, juraría que entorpece su hermosa piel. Su piel posé un color claro, pero igual de bello que el color moreno. Es cierto que el moreno es semejante al oro, al dorado, y que esos colores son sinónimos de belleza, riqueza e incluso entusiasmo. Llevan garbo esos colores, se moverían con soltura en una pista de baile. Pero sin embargo el color de piel del amor es claro. Como si nunca en su vida hubiera tomado el Sol. Si, aquella estrella poderosa con menos poder que el amor. ¿Por eso es tan claro el amor? ¿Porque posé más poder que el famoso Sol? Aquel Sol que ha resistido siempre al calor, en cambio su piel no, se ha quemado a veces de tanto calor y se vuelve rojo, semejante a sus labios. ¡El amor es rubio es cierto! Un rubio que ahora sí, es semejante al dorado. Posé un cabello de oro macizo. ¡Que nadie le arrebate jamás el oro que guarda entre majestuosos enredos de cabello! El amor pose el cabello más largo del mundo, inacabable. Luce vestidos de gala, rojos, ahora sí; del color de un corazón. Un rojo intenso, duro pero sin embargo dulce. Nada vale del amor si no observas su sonrisa, cualquier persona pose labios, cabello y dientes, todos lucimos vestidos de gala, pero nadie tiene la sonrisa que ella muestra, aquella que no puedo ni sé describir.

¡El oro es tan pequeño!

¡El oro es tan pequeño, tan insignificante, tan nefasto y espeso, tan agrio y tan sucio! ¡Los sentimientos tan cortos! ¡Las palabras tan sordas! Las miradas tan escondidas y el silencio tan romántico… ¿Por qué estoy tan alegre, si nada de esto es cierto? Tu risa en cambio, vale más que el oro, es más intenso que un estúpido sentimiento. Contagiosa incluso más que las palabras, eterna y más apreciada que una mirada. Mientras besa se hace más fuerte que el silencio. ¡Tan alegre de que sea cierto!

Su cabello

Ella pose un cabello de oro. Un largo camino de oro donde es imposible observar el precipicio y ni siquiera el final. ¿Algo tan bello sin un final?, os preguntareis. Es cierto, es inútil poseer una cosa sin saber cuándo llegará a su glorioso fin, y donde se encuentra esté. ¿Cómo será ese final? De hecho, no hace falta llegar al final para sentir la gloria. Los dos extremos de su cabello se hacen eternos. Liso y tan llamativo como el altísimo Sol y tan extenso como el cielo.

Las venas se tiñen acabando en "o"

Las venas se tiñen por sentimiento
De azul cielo
De rojo cercano al negro
O de negro intenso
De azul claro
De rojo fuego
O de rosa con trozos negros, o sin ningún negro
Se tiñen durante el camino
O mientras caminas hacia el destino
Se tiñen llorando
O incluso riendo, cantando
¿O se desnudan? ¡Sin pedirles nada a cambio!
Mientras las venas corren, se tiñeran corriendo
¿A que velocidad deben correr las venas por el cuerpo?
Se tiñen por amor, en este caso de rosa, sin ningún negro
Se tiñen por los llantos, ahora de azul cielo
O sin control, la vena acabaría petando
¡Tanto llanto es malo diría tu cuerpo!
Tanto dolor, tanto amor, ¡tanto tanto!, es tanto fracaso...
El rosa es un color que refleja sentimiento
El negro intenso es demasiado negro
Y el azul, no sirve de nada si no eres un príncipe ni tienes reino
¿Un príncipe? ¡Yo no quiero serlo!
¡Y el rosa no me gusta tampoco!
Teñirse las venas sin control, ¡por dolor, por amor!, por sentimiento

Último posible discurso de G. W. Bush antes del "pacto de paz" entre Irak

Buenos días pueblo de América somos un país que demuestra orgullo y gloria a todos aquellos que nos siguen, pero sin embargo algunos países ajenos son plenamente destructores, es decir Saddam Hussein y su régimen, opuestos a la paz y no habitantes de esta. Gracias a vosotros y a un gran dialogo hallaremos la paz. La iniciaremos después de un largo camino de esfuerzo, constancia y reivindicación de prestigio. No os engañare, este camino, esta búsqueda de honor y paz, de pura fama a base de gran gloria, la destruyen otros; esta plagado de piedras llamadas consecuencias, unas más importantes, otras menos, pero todas nos importan. Es posible que estas nos afecten, la paz que podríamos conseguir podría ser nula, o incluso falsa y corrupta, y esta desembocaría a posibles grandes guerras que no podríamos detener, la guerra crecería cada vez más y acabaríamos colapsados, derrumbados no sé si nosotros, pero si el orgullo de todo el pueblo. Es cierto que sin esfuerzo no hay dolor y ese posible dolor podría convertirse en una paz verdadera, pero lo que todos sabemos es que el esfuerzo no se consigue solo con las manos y el pensamiento de un único país y es así que toda Unió Europea, es decir todos los pensamientos positivos y las manos bondadosas se organizaran por conseguir la paz más próxima. Y esta es la consecuencia más importante que tenemos que tener en mente ya que la paz y la amistad mutua es lo más importante del camino hacia la gloria. La posible guerra que sin embargo, es posible que estructuremos, debemos eliminarla y extraerla de nuestra senda. Debemos hacer lo posible para la estimada paz, y si para ello debemos intercambiar productos, lo haremos, todo menos la dichosa guerra.

Querido pueblo americano; la paz es el mayor regalo que nos da la vida, es la inmortalidad que sigue con nosotros desde que nacemos, tan solo debemos darle color y luz para que brille.

Vivir, ansiar poder, gritar libertad, escribir todos los besos que podáis y editarlos cuando os plazca, hacer de vuestro verbo poder algo inmenso, algo mágico, algo semejante al oro, a las joyas, al dinero y hasta a la felicidad, semejante al poder que conlleva el grito, el llanto o la carcajada, y no esperéis a la muerte como algo terrible, sino cansaros de la vida y llegar al final como si fuera un día más.

Som lliures?

Es molt difícil arribar a una conclusió de si som lliures o no, m'atreviria a dir que es una de les preguntes més difícils, ja que la definició de llibertat en els nostres dies es molt diversa i alhora complicada, encara que la paraula llibertat m’encanta. És una paraula que transmet una harmonia perfecta només per escoltar-la, però també es cert que a vegades aquesta transmissió es interrompuda i es torna defectuosa. Això passa habitualment en les nostres vides, la llibertat tindria que ser completament nostre, manejable només per nosaltres i amb una clau guardada només per a nosaltres. Llàstima que això no es produeix sempre, aquesta clau es descoberta i es quan una part de la nostra estimada llibertat se’n va i només queda un petita ració d’aquesta, podem fer tot allò que volem però sempre amb les conseqüències que aquesta acció comporta. Volem fer tot allò que el nostre cap ens mana, podem fer-ho, ningú ens ho impedeix (aquesta seria la que actualment anomenen llibertat), però sempre reconeixent les conseqüències finals. Acabaré afirmant que tenim una llibertat falsa, corrupta, creada per les lleis, pels polítics amb barba, calbs i cobejosos i alguns fins i tot estúpids, aquells la diuen llibertat. Però no s’assembla en gens, la llibertat es fer allò que vulguis sense cap tipus de problema i actualment aquesta llibertat no existeix, potser aquell dia arribarà, jo l’esperaré amb tota l’alegria del món però de mentre ens tenim que conformar amb el que tenim. Una llibertat, al cap i a la fi ben construïda, som mínimament lliures, però també es cert que hi ha persones que diuen que un món completament lliure acabaria sent un caos mundial. Potser si, potser no; som lliures de pensar allò que vulguem.

La muerte en tiempo de crisis

Recuerda el rostro olvidado
niega la edad recorrida
amándonos,
¿Dónde sueñan acabar?
¿Cómo soñamos morir?
tan infantes,
en que, la gran ignorancia
cómo, tiempo de nacido
y reinado,
con placer aquí y allá.
Cualquier momento adecuado
fue débil e interrumpido

Llegaremos a un futuro
que soñamos en presente
muy, muy corto,
tanto, como vida misma
vivo como aquel gran mar
deseado,
por los que no lo conocen
odiado, por tantos otros.
Inquilino,
que se aloya en cada tiempo
al principio del pasado

Esos astros valerosos
Intactos des de entonces
mis políticos,
necios, mondos de cabello
faltos de la inteligencia
se consumen,
no por lo llamado amor
ni por falta de poder
temerosos,
sus diabólicas penumbras
señor de pieles oscuras
no hay clases para la muerte.

El señor de oscuros ojos
eficiente y trabajador
da tristeza.
Reyes siempre con su reino
creen, no hay nadie tan fuerte
que los trate,
como estúpidos plebeyos
felices, como un rey mueren

Libertad

- Estúpido plebeyo, ven corriendo a mí, explícame; ¿la libertad tiene alguna buena definición?

- ¡Oh mi rey! ¿Por qué pregunta tal estupidez? La libertad posee la definición más exquisita de todo el reino. No se ha dado cuenta que la libertad es independiente, carece de alguien que le recrimine lo que hace.

- ¿No posee a ningún rey que le insulte? ¿Qué le ordene arrodillarse junto a sus pies e incluso a besárselos?

- ¡No, señor! E incluso me atrevería a decirle que la libertad es una bella princesa, con los mejores modales del mundo. Hasta creo que se esconde dentro de nosotros como una pequeña ilusión o incluso como una gran necesidad que crece con el tiempo.

- Gracias, plebeyo. ¿Una pregunta más la libertad forma parte de la felicidad?

- Oh sí, señor. La felicidad es una gran componente pero está formado por diferentes elementos, unos más grandes que los otros; el dinero, las ilusiones, la amistad, el amor, la diversión…. Pero uno de los más grandes, es la libertad.

- Debería vivir la vida un poco más, ¿no crees? Ser un poco más como la libertad.

- Como vos quiera señor, pero sin duda la libertad es la felicidad que un ser humano quiere conseguir, no la que debería conseguir. Si usted desea vivir la vida un poco más, esa será la felicidad que la libertad le proporcionara, la que usted desee.