martes, 25 de mayo de 2010

Mi magia eres tú


Te quiero y por lo todo lo que sale a continuación, he vuelto a ti.

Porque no se puede dejar a atrás tus labios, tu cara, tu sonrisa o simplemente ese pelo que te hace ser tan especial. O esa locura que llevas por dentro, esas ganas de vivir de pasártelo bien. Esa simpatía que tienes que sobre todo, me encanta. No se puede. No se puede olvidar esa piel que tienes, esa piel que no me canso de besar o simplemente de tocar. Esa piel que se te pone cada vez que te beso en el cuello o la sensación que me das cada vez que me dejas rozar tus hermosos labios con los míos. O el gran momento de llegar a casa oler mis manos y saber perfectamente que mis manos huelen a ti, que me recuerdan al amor de mi vida. Porque eres tú la que tiene un olor perfecto para mí. Que con esas simples manos, las mías, porque son ellas las únicas que tienen la suerte de haber tocado la que es para mí la piel y el rostro de la mejor persona del mundo. Muchísimos momentos tengo de ti en mi memoria, muchísimos. Espero que no creas que solo son besos, risas y abrazos. Pues no. Porque aun me acuerdo que siempre te tengo que quitar el pelo tan largo que tienes y tan rizado, para poder besarte, para poder dejarte aunque fuera una de las pocas huellas que te he dejado en tu bella mejilla. Para poder afirmarte que te quiero y que sobretodo te quiero y mucho. Y ya que mi memoria afortunadamente no es tan corta y esto va de recuerdos. Me llega a la mente unos de los momentos más vergonzosos que he podido tener con una persona, y que encima amo. Ya que dar una rosa a la persona que más amas en este mundo delante de todo su cole, no es muy normal. Pero tú ya sabes que a mí eso me daba y me da igual, que yo te quiero muchísimo y por hacerte feliz o por verte reír aunque sean unos pocos segundos me alegraras a mí una vida entera. Que sepas, que aun recuerdo nuestro primer beso, que aun recuerdo mi primer beso con una persona, que doy gracias a Dios que fueses tú. También doy gracias a Dios al que invento Casagemas, al que invento el pasillo de Casagemas, al que invento que los martes por la tarde eran día de entreno. Recuerdo que mis días preferidos eran mis días de básquet, no porque tenga básquet, y me encante ese deporte, sino porque amo a la persona que veía en esos entrenos, a ti. Amo la persona que me daba un beso antes y después de ellos, tú. Pero también odio al que invento la cortina, porque por ese trozo de tela me impedía ver como estaba entrenando, la que te vuelvo a repetir, eras y eres para mí el amor de mi vida. No sé si te ha quedado claro o no que te quiero. Pero si no, aun tengo miles de recuerdos que se me han quedado clavados en la memoria por el siempre hecho de amarte, tanto y tanto. Como la primera vez que vi a tus padres, nunca había sentido tanta vergüenza delante de unos padres, te lo aseguro. Porque jurarles que iba a cuidar de su hija, tu. Que te iba a hacer estudiar y que iba a amarte como si de mi vida tratara es difícil. Pero no imposible. Porque no hay nada imposible si tú me ayudas, si tú estás ahí para amarme como yo te amaré, para besarme más de lo que yo te besare en mi vida. Cuidarme, porque te lo aseguro, yo te cuidare siempre.

Hasta el infinito y más allá. Espero que tu llama nunca se apague, pero si eso pasa. No lo dudes, la mía siempre seguirá encendida.

1 comentario:

  1. David es precioso, espero que algun dia llegues mas que esto, porque te lo mereces.
    Te quiero(L)

    ResponderEliminar